SURCOS (1951)

Esta película es una de las más reseñables de nuestro cine no solo por el estilo al que se adscribe sino por el contexto en el que se desarrolló, la consolidación del régimen fascista y la aparición de dos corrientes dentro de ella, la conservadora y la aperturista. 

La primera buscaba mantener el régimen como un sistema hermético y estricto en sus normas, mientras que la segunda creía que introducirse ligeramente en la el ámbito internacional podía ayudar a la economía y posición del país. 

Esta polémica se ve reflejada en Surcos, puesto que una familia de campesinos se muda a la ciudad en busca de trabajo, sin embargo, esa ciudad está plagada de peligros, tentaciones, trapicheos y gente malintencionada. 

Además la película enaltece los valores cristianos y de buena mujer como los de la novia de Manolo, frente a los de Pili y Toñi, una femme fatale y una cantante que se acuesta con un hombre de negocios. 

En definitiva la película muestra una economía nacional empobrecida y una capital del país delincuente y pecadora, lo cual puso en tela de juicio el rumbo de la dictadura.